Jardines y quimeras


Después de indagar en la memoria histórica a través de paisajes y bosques nevados con la serie Laissons parler les absents (2011-2013), Pierre Marquès vuelve de nuevo a la naturaleza. En esta ocasión deja de lado el estremecedor relato del campo de exterminio de Sobibor, levantado en medio de un bosque y estratégicamente rodeado de gansos. A Jardines y quimeras (2017), Marquès se recrea en las múltiples gamas de verdes que aparecen en cualquier huerto o vergel. Jardines que crecen más allá del cielo, que chorrean y desbordan los límites del papel. Verdes exuberantes convertidos a golpe de spray, carboncillo, acuarela y pintura al óleo, en coloristas ramilletes de quimeras.


Aina Mercader

crítica d’art i comissària